Pintura de Teresita Marti
Mi casa queda silenciosa y sola
desde que te fuiste a ver otros mundos
Las piedras que pisaste vierten lágrimas
y no alumbra ya el farol de la esquina.
El surco que en mí dejaste es profundo,
nada cura la tristeza de mi alma
En tu maleta, amor, llevas mi vida
desde que te fuiste a ver otros mundos
Las piedras que pisaste vierten lágrimas
y no alumbra ya el farol de la esquina.
El surco que en mí dejaste es profundo,
nada cura la tristeza de mi alma
En tu maleta, amor, llevas mi vida
Juan Pan García
Me encantan los versos y el cuadro que provoca la inspiración.
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Lola, un placer verte por mi espacio. Un beso fuerte, amiga.
ResponderEliminarHermoso poema Juan Pan García, me alegra mucho que mis pinturas te sirvan de fuente de inspiración, para hacer volar tus pensamientos y poder pasarlos al papel, o a la tecnología moderna, para que los demás podamos disfrutarlos. Gracias Teresita Martí.
ResponderEliminarMe encantan tus pinturas, Teresita. Gracias por permitirme usarlas.
ResponderEliminarmuy buen poema
ResponderEliminartriste y melancólico.
hasta pronto Mario
Hola, Mario: Gracias por pasar y comentar. Un abrazo, amigo.
EliminarEste también lo había visto...
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