Cerrada a cal y canto la ventana
donde tú y yo felices conversábamos.
La vida nos ofreció otros caminos,
a pesar de estar ambos enamorados.
Han pasado largos, lentos, los años
y juro que nunca te he olvidado
y creo que a ti te pasa lo mismo
a pasar de estar los dos bien casados.
Por la ventana las flores asoman
gritando el gran amor que a ti te invade
y que nunca pudimos disfrutar
por causas que al caso ahora no atañen.
El Sol besa las flores de tus rejas,
ellas muestran las bondades de tu alma,
porque eres bella, por dentro y por fuera.
¡La más bonita flor que Dios creara!
¡La más bonita flor que Dios creara!